El estilo Abelé 1757
El Arte de coleccionar
lo mejor de la tierra
Imaginar un champagne es ante todo un arte: el de coleccionar parcelas de viñedos únicas.
Una selección exclusiva
Fiel a la visión de sus fundadores, Abelé 1757 selecciona las que tienen un potencial aromático más que prometedor.
Estrechamente ligada a la visión de sus fundadores, esta libertad para imaginar creaciones atrevidas, ha sido siempre la firma intemporal de Abelé 1757.
Desde la “Côte des Blancs” hasta la “Montagne de Reims” o los apreciados “Coteaux des Riceys”, la Maison Abelé dispone de multitud de parcelas de viñedos que le permiten inspirarse para la creación de sus champagnes. Una paleta aromática única que reinventa y mezcla después de cada cosecha para sublimar sus añadas.
Para garantizar un suministro constante de la más alta calidad, Abelé 1757 ha establecido estrechos vínculos con un pequeño círculo de viticultores apasionados.
Enamorados de su tierra, estos orfebres practican desde hace tiempo una viticultura respetuosa con la naturaleza en parcelas a veces tan grandes como jardines.
Valores comunes de excelencia, respeto y lealtad que estos hombres y mujeres comparten con orgullo con la Maison.
Abelé 1757, Tomar su tiempo
Precioso eco del paso del tiempo, Abelé 1757 es una de las mejores referencias en Champagne. Fiel a la filosofía de sus fundadores, saca el máximo provecho del paso del tiempo y de la materia para conferirles su forma y sabor.
Fábrica de grandes vinos de Champagne, esta Maison construye con su artesanía un puente entre el presente y el futuro. Un trabajo de orfebrería que se plasma a la perfección en creaciones marcadas por la delicadeza y la precisión.
